Mateo 6:1-6,16-18 Miércoles de Ceniza
Reflexión sobre el cuadro
Nuestro cuadro de 1860 del pintor romántico alemán Carl Spitzweg se titula "Miércoles de Ceniza". Vemos a un abatido y triste payaso de carnaval sentado en el rincón de una celda, con la cabeza agachada, los brazos cruzados y el rostro en sombras. El carnaval ha terminado. Un payaso normalmente desencadena risas, bromas, excesos, exuberancia, pero aquí se le representa exactamente lo contrario. Un payaso normalmente llama la atención y quiere ser el centro de atención, pero no en este cuadro. Y de eso trata exactamente la Cuaresma: de no ser el centro de atención. Eso es lo que nos enseña Jesús en la lectura del Evangelio de hoy: No hagáis alarde de vuestras buenas obras ante los hombres para llamar su atención". Jesús nos enseña a preocuparnos menos por cómo nos ven los demás y a entrar en un período de introspección y reflexión tranquila. Ahí es donde se encuentra ahora el payaso.
El fondo del cuadro cuenta el resto de la historia: es sencillo, despojado. No hay cuadros en la pared ni distracciones, sólo la luz natural que entra por la ventana ilumina el cuadro. La celda funciona casi como un lugar de retiro despojado.
Es un buen cuadro para ilustrar en qué consiste el comienzo de la Cuaresma: reflexionar sobre nuestra forma habitual de actuar, hacer un poco de ayuno, rezar un poco más y dar limosna. Es el momento de despojarnos de nuestros excesos, de nuestras máscaras y de entrar en una celda espiritual de quietud, paz y descanso....
by Patrick van der Vorst
Miércoles de Ceniza,
Pintura de Carl Spitzweg (1808-1885),
Pintado hacia 1860,
Óleo sobre lienzo
© Staatsgalerie, Stuttgart, Alemania
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