Señor, cierra todas las heridas de mi corazón que no me dejan ser
capaz de servirte con pasión. Dame la fuerza y valentía de donarme a los demás.
No puedo decir que te amo si por otro lado desprecio a los demás,
sobre todo los que están en necesidad. Sería un mentiroso si así lo hiciese.
Es amando a los demás como puedo lograr amarte verdaderamente a Ti.
No puedo separar la caridad hacia el otro de la gracia santificadora de tu
amor.
Dame el don de tener un amor generoso. Dame de tu fuerza para no
dejarme vencer por las dificultades que me quieran trabar la misión de
honrarte.
Abro mi corazón para que tu luz y tu verdad penetren en su
profundidad y lo renueven con la fuente inagotable de tu compasión y de tu amor
por todos.
Pasa tu mano sanadora sobre mí para que todo sentimiento de odio,
ira, rencor y egoísmo sea desterrado de mi mente, corazón, alma y espíritu.
Líbrame de mis inseguridades. Que pueda ver mis propios errores
para así corregirme bajo la Ley de tu Palabra y poder así caminar seguro y
confiado.
Todo te lo debo a Ti, por eso todo te lo entrego. Bendice mis
planes, mi vida y mis acciones para que todo yo pueda irradiarte sólo a Ti.
Amén
Pildoras de Fe
Muchas, gracias por su compartir, y generosidad.
ResponderEliminar