"Querida Madre de Dios, Inmaculada,
enséñame a hacer silencio con mis ojos para ver sólo lo hermoso.
Enséñame a hacer silencio con mis oídos
para escuchar sólo lo bueno.
Enséñame a hacer silencio con mis labios para que nunca
falte contra el amor la verdad, la pureza y la justicia.
Madre de Dios, Sede de la Sabiduría, Madre del amor hermoso,
enséñame a hacer silencio en mi corazón,
a fin de que sólo busque a Dios y lo que es de Dios.
Enséñame a hacer silencio con la voluntad,
para que yo quiera lo que Él quiere,
cómo, cuándo y dónde Él lo quiera."
Amén
Texto extraído de la Novena de Navidad de las Hnas. Adoratrices de Schoenstatt.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por dejar tu comentario, me alegra el alma