Un Año Nuevo,
como portal sostenido por 365 vigas, nos espera para vivir junto a Dios y para, después de Navidad, no olvidarle.
¡Vayamos!
¡Corramos!
Un
calendario, con 365 días virginales, aguardan el color de nuestra esperanza, la
profundidad de nuestra fe, la riqueza de nuestras buenas obras.
¡Vayamos!
¡Corramos!
Para que, la
PAZ que nos ha brindado la Navidad no se apague con el cañón de la violencia, ni se marchite la esperanza que el hombre abriga.
¡Vayamos!
¡Corramos!
Que los 12
meses que nos saludan sean
oportunidades para ser mejores.
Piedras para
construir un nuevo mundo. Palabras que
alienten al hombre.
¡Vayamos!
¡Corramos!
Dejemos atrás
sinsabores y fracasos. Apartemos a
un lado lo que nos impide vivir de
nuevo y con aire fresco. Dejemos atrás
el “ya no puedo más”. Dios, entre
otras cosas, nos da la
fuerza que viene de lo alto.
¡Vayamos!
¡Corramos!
Atrás quedó
lo viejo y nos espera lo nuevo. Atrás quedaron asignaturas pendientes pero Dios nos da otra oportunidad, para amar y entregarnos, para
levantarnos y ser más hermanos.
¡Vayamos!
¡Corramos!
El Señor, con
su Nacimiento, ya está
alumbrando con 12 lámparas cada mes de este Año Nuevo.
El Espíritu,
con su brisa suave nos infundirá
365 soplos de aliento divino.
La Virgen
María, Madre de Dios y nuestra, marchará delante de nosotros, sus hijos e hijas, ayudándonos a vivir dignamente cada hora y cada segundo, cada día
y cada instante de este Año
Nuevo que ahora se inicia.
¡Vayamos!
¡Corramos!
¡La vida y la
fe nos espera!
P. Javier Leoz
FELIZ AÑO NUEVO !!!