SEÑOR MÍO Y DIOS MÍO
Enséñame a amar tus caminos,
a escuchar tu voz en el silencio
y a seguir tus mandamientos con un corazón libre y agradecido.
Guía mis pasos con tu sabiduría,
abre mi mente a tu verdad
y que mi alma encuentre descanso en tu Palabra que consuela y fortalece.
Cuando el alma se extravíe,
regrésame con tu amor;
cuando el miedo me detenga,
sostenme con tu promesa fiel.
Muéstrame tu ternura cada día,
para que mi espíritu viva en paz
y mi gozo esté en cumplir tu voluntad.
Soy tuyo, Señor:
sálvame, guíame, fortalece mi espíritu, consuélame, aumenta mi fe e ilumina mi corazón,
y que siempre procure buscar, para tu gloria y con amor, tus leyes y tu voluntad.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por dejar tu comentario, me alegra el alma