Señor, en tu providencia quisiste que la Madre de tu Hijo experimentase las angustias y los sufrimientos humanos; por la intercesión de María, madre de la merced y libertadora de los cautivos, concede a los que sufren cualquier modo de esclavitud libertad de los hijos de Dios.
Hay que <<trabajar>> Para tener en sí, el alma y el espíritu de María.
La noche del 1 al 2 de agosto de 1218, la Virgen se les apareció a Pedro Nolasco, a Raimundo de Peñafort, y al rey Jaime I de Aragón, y les comunicó su deseo de fundar una congregación para redimir cautivos de los musulmanes, expuestos a perder la fe.
La
Virgen de las Mercedes es una advocación mariana que nos recuerda la
grandeza de la misericordia divina y la compasión que debe reinar entre
los seres humanos. ¡María, alcánzanos la gracia de Dios según vuestra merced! ¡No desampares a ninguno de tus hijos!ACIprensa
NUESTRA SEÑORA DE LAS MERCEDES TE ROGAMOS POR TODAS ALMAS CAUTIVAS.
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