Estuve invitado al alba desde el principio,
a mi entrada al mundo,
para trabajar en la viña del mandamiento,
por un denario que llevaba tu efigie.
Yo escuché al que invitaba,
ya al entrar en la viña.
Pero fui negligente en la práctica de la palabra,
por eso no espero recompensa.
Pero, oh Señor, generoso en todo,
hazme gratuitamente el presente de tu gracia,
a ejemplo de los obreros de la hora Once,
que entre en la viña, en el paraíso del Edén.
San Nersés Shnorhalí (1102-1173)
patriarca armenio
Jesús, Hijo Único del Padre, II (SC 203. Jésus Fils Unique du Père, Cerf, 1973), trad. sc©evangelizo.org
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