Antes de cerrar los
ojos,
los labios y el
corazón,
al final de la
jornada,
¡buenas noches!,
Padre Dios.
Gracias por todas las gracias
que nos ha dado tu
amor;
si muchas son
nuestras deudas,
infinito es tu
perdón.
Mañana te
serviremos,
en tu presencia,
mejor.
A la sombra de tus
alas,
Padre nuestro,
abríganos.
Quédate junto a
nosotros
y danos tu
bendición.
Antes de cerrar los ojos,
los labios y el
corazón,
al final de la
jornada,
¡buenas noches!
Padre Dios
Gloria al Padre omnipotente,
gloria al Hijo
Redentor,
gloria al Espíritu
Santo:
tres personas, sólo
un Dios.
Amén
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por dejar tu comentario, me alegra el alma