El Papa Benedicto XVI en
la
homilía de la Santa Misa de la Fiesta del
Bautismo de Jesús del año 2006, se refirió a nuestro
SÍ A DIOS:
...Del
mismo modo que en el diálogo
bautismal el "no" se
articula en tres renuncias, también
el "sí" se articula en tres
adhesiones:
"Sí"
al Dios vivo, es decir, a un Dios
creador, a una razón creadora que da
sentido al cosmos y a nuestra vida;
"Sí" a Cristo, es
decir, a un Dios que no permaneció
oculto, sino que tiene un nombre,
tiene palabras, tiene cuerpo y sangre;
a un Dios concreto que nos
da la vida y nos muestra el
camino de la vida;
"Sí" a la comunión de
la Iglesia, en la que
Cristo es el Dios vivo, que
entra en nuestro tiempo, en nuestra
profesión, en la vida de cada día.
Podríamos
decir también que el Rostro de Dios,
el contenido de esta cultura de la
vida, el contenido de nuestro gran
"sí", se expresa en los 10
Mandamientos, que no son un paquete de
prohibiciones, de "no", sino
que presentan en realidad una gran
visión de vida.
Los 10 Mandamientos
son un:
"Sí"
a un Dios que da sentido al vivir
(los tres primeros mandamientos);
"Sí" a la familia (cuarto mandamiento);
"Sí" a la vida (quinto mandamiento);
"Sí" al amor responsable (sexto mandamiento);
"Sí" a la solidaridad, a la responsabilidad social, a la justicia (séptimo mandamiento);
"Sí" a la verdad (octavo mandamiento);
"Sí" al respeto del otro y de lo que le pertenece (noveno y décimo mandamientos).
"Sí" a la familia (cuarto mandamiento);
"Sí" a la vida (quinto mandamiento);
"Sí" al amor responsable (sexto mandamiento);
"Sí" a la solidaridad, a la responsabilidad social, a la justicia (séptimo mandamiento);
"Sí" a la verdad (octavo mandamiento);
"Sí" al respeto del otro y de lo que le pertenece (noveno y décimo mandamientos).
Esta
es la filosofía de la vida, es la
cultura de la vida, que se hace
concreta, practicable y hermosa en la
comunión con Cristo, el Dios vivo,
que camina con nosotros en compañía
de sus amigos, en la gran familia de
la Iglesia.
El
Bautismo es don de vida. Es un
"sí" al desafío de vivir
verdaderamente la vida, diciendo
"no" al ataque de la muerte,
que se presenta con la máscara de la
vida. Es un "sí" al gran
don de la verdadera vida, que se
hizo presente en el Rostro de Cristo,
el cual se nos dona en el Bautismo y
luego en la Eucaristía (...)
Demos gracias
hoy al Señor porque Dios no se
esconde detrás de las nubes del
misterio impenetrable, sino que,
como dice el Evangelio de hoy, ha
abierto los cielos, se nos ha
mostrado, habla con nosotros y está
con nosotros; vive con nosotros y
nos guía en nuestra vida. Demos
gracias al Señor por este don y
pidamos por nuestros niños, para
que tengan realmente la vida, la
verdadera vida, la vida eterna.
Amén
Me ha gustado mucho esa clasificación de los Mandamientos y el SÍ a un Dios que no permanece oculto.
ResponderEliminarGracias, Magda
¿Has visto la mejoría de Arcendo? Gracias a Dios, qué alegría ¿Verdad? Seguiremos rezando.
Un beso.
Síiii ...gracias por pasar por el blogs y dejar tan buena noticia,seguimos unidos en oración! Un gran abrazo!...
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