Tú eres la vieja Rebeca,
la divina coladera,
la que cuela al pecador
por una puerta trasera.
la divina coladera,
la que cuela al pecador
por una puerta trasera.
Una madre no condena,
ni deja que se condene
un hijo, sea como sea.
ni deja que se condene
un hijo, sea como sea.
Lo más creativo…¡el amor!
Por eso tanta artimaña,
-¡qué bien que se las apaña!-
para convertir el agua,
convertir al pecador.
Por eso tanta artimaña,
-¡qué bien que se las apaña!-
para convertir el agua,
convertir al pecador.
“Si es que este es hijo mío,
un día me rezó una salve.
Si es que este es hijo mío,
cayó en las redes del aire,
del aire infecto y malsano,
que respiró siendo infante.
un día me rezó una salve.
Si es que este es hijo mío,
cayó en las redes del aire,
del aire infecto y malsano,
que respiró siendo infante.
Si es que este es hijo mío,
a quien nunca dijo nadie
que soy su madre y lo quiero,
pase siempre lo que pase.
a quien nunca dijo nadie
que soy su madre y lo quiero,
pase siempre lo que pase.
Si es que este es hijo mío,
que se perdió por la calle,
no tuvo familia unida,
y mendigó siempre en balde
las migajas de cariño,
que el epulón no comparte."
que se perdió por la calle,
no tuvo familia unida,
y mendigó siempre en balde
las migajas de cariño,
que el epulón no comparte."
Autor del poema: Alfonso Francia.
Fuente:http://alfonsofrancia.com/animadores/wordpress/2017/12/07/ramillete-de-poemas-a-la-virgen/
MISLopez
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