Junto a San José
¡Oh glorioso San José, esposo virginal
de María y padre adoptivo
de Jesús, a ti me consagro en este
nuevo día que el Señor me regala.
Te saludo con el mismo respeto y amor
con que te saludaba el Niño Jesús
cada mañana en Nazaret.
Te pido que me tomes de la mano como
tomaste la de tu Hijo cuando era
pequeño, y me conduzcas durante esta
jornada por el camino de
la voluntad de Dios.
San José, custodio fiel de la Sagrada
Familia, guarda mi alma de todo
peligro y tentación.
San José, proveedor de la casa de
Nazaret, proveeme de todo lo necesario
para cumplir hoy mi deber de estado
con amor y perfección.
San José, hombre justo y silencioso,
enséñame a trabajar con orden, paz y
alegría, ofreciendo cada esfuerzo al
Corazón de Jesús por manos de María.
Consagro a tu paternal corazón:
mi cuerpo, mi alma, mis pensamientos,
palabras y obras de este día; mis alegrías
y sufrimientos, mis éxitos y fracasos;
mi familia, mi trabajo, mis proyectos y
todas las personas que encontraré.
Haz que viva hoy como tú viviste: oculto
en Dios, fiel en lo pequeño, totalmente
entregado a la voluntad del Padre.
¡San José, terror de los demonios,
ruega por mí!
¡San José, esperanza de los enfermos,
consuela mi corazón!
¡San José, patrono de la buena muerte,
prepárame para que, cuando llegue
mi hora, pueda morir como tú:
en brazos de Jesús y de María!
Amén
Fuente: Louisa.gcia
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