𝐕𝐢𝐫𝐠𝐞𝐧 𝐌𝐚𝐫í𝐚,
alba pura y serena, en
este Sábado, tu luz me encadena.
Madre del cielo, con manto estrellado,
guías mi alma en el día iniciado.
Tu corazón, faro de amor y ternura,
alumbra el sendero en mi noche oscura.
𝐌𝐚𝐝𝐫𝐞 𝐦í𝐚,
sostén mi espíritu con tu alegría.
Bajo tu mirada, tan dulce y clemente,
encuentro paz en mi ser penitente.
En este día te ofrezco, Reina Santa,
mi fe, mi esperanza, mi voz que te canta.
Oh 𝐕irgen 𝐌aría, 𝐌adre de 𝐃ios y
𝐌adre nuestra, cúbreme siempre con
tu santo velo. Que este día brille con tu
amor divino, y mi corazón siga
tu eterno camino. 𝐀𝐌é𝐍.
𝐓otus 𝐓uus, 𝐌aría!
Fuente:Louisa,gcia
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