Señor mío y Dios mío,
Tú me hiciste con amor,
y solo el amor me puede llevar de vuelta a Ti.
Tú eres mi origen y mi término,
mi descanso y mi deseo.
Hoy reconozco que no soy solo lo que hago,
ni lo que entiendo,
sino lo que amo.
Mi amor me mueve,
mi amor me define,
mi amor me lleva.
Y he amado tantas cosas que no eras Tú,
he entregado mi corazón a afectos pasajeros,
me he dejado arrastrar por deseos que no me elevan.
Por eso te suplico, Señor:
ordena mis amores.
Haz que mi corazón ame como Tú amas.
Haz que mi voluntad se incline hacia el bien,
que mi libertad se abrace a tu querer,
que mi peso interior sea tu Espíritu.
Tú conoces mis búsquedas escondidas,
los ídolos que me pesan y me arrastran,
las máscaras que me ocultan de mí mismo.
Ven y libérame desde dentro.
Hazme volver a mi centro,
allí donde habitas Tú.
Mi peso sea tu Amor,
mi camino sea tu Verdad,
mi alegría sea tu Voluntad.
Que cuando ya no piense,
ni hable,
ni decida…
aún entonces,
mi amor me lleve a Ti.
Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por dejar tu comentario, me alegra el alma