domingo, 14 de septiembre de 2025
𝐎𝐑𝐀𝐂𝐈Ó𝐍 𝐃𝐄 𝐋𝐀 𝐒𝐀𝐍𝐓𝐀 𝐂𝐑𝐔𝐙
Granito de arena de Esperanza...La Cruz, ¡la Santa Cruz!, pesa
viernes, 1 de agosto de 2025
Granito de arena de Esperanza... Viernes de Pasión
Tener fe es tener confianza, es que esa confianza no flaquee.
Universitarios Católicos
"Este corazón divino que toleró ser atravesado por una lanza enemiga para derramar por esa sagrada abertura los sacramentos con los que se formó la Iglesia, de ningún modo ha dejado de amar a los hombres, sino que vive permanentemente en nuestros altares, prisionero de amor y víctima propiciatoria por todo el mundo"
SAN DANIEL COMBONI
Corazón de Jesús, víctima propiciatoria por todo el mundo, ten piedad de nosotros !
LA CIENCIA DEL CORAZÓN DE JESÚS.
Lee en mi Corazón como en un libro, lo que debes hacer para servirme bien.
Fuente: https://x.com/esclavademaria
sábado, 3 de mayo de 2025
Día de la Cruz de Mayo
Cada 3 de mayo, en muchos lugares -especialmente de Iberoamérica- se conmemora la “Fiesta de las Cruces” o “el día de la Cruz de Mayo”, una hermosa y muy arraigada tradición católica llena de expresiones de religiosidad popular en honor al símbolo mayor de la cristiandad: la cruz.
Sus raíces históricas se extienden hasta los tiempos del cristianismo primitivo, en Jerusalén, donde surgió la veneración a la cruz de Cristo. No obstante es durante el siglo XVII, en España, cuando la devoción a la cruz cobra una fuerza e impulso renovado. Hoy, con el mismo cariño y cuidado, los devotos, repartidos por el mundo, conservan muchas de las antiguas prácticas y tradiciones.
La ‘Invención’ de la Santa Cruz
En el rito romano esta festividad recibe el nombre de ‘Invención de la Santa Cruz', en alusión al hallazgo del madero en el que Cristo fue crucificado. La voz ‘invención’ es la traducción del término latino ‘invenio’, cuyo significado es ‘descubrimiento’. Precisamente es eso lo que se celebra: el descubrimiento de la cruz de Cristo por Santa Elena (c.250-330), ocurrido el 3 de mayo de 366.
Esta festividad, como se ha señalado, recibe también el nombre de ‘Día de la Cruz’ o ‘Día de la Santa Cruz’.
Con especial fervor, las celebraciones se realizan en ciudades de España, Chile, Ecuador, El Salvador, Guatemala, México, Paraguay, Perú; Trinidad y Tobago, Argentina, Colombia y Venezuela. En cada ciudad, los lugareños suelen intervenir el espacio público con cruces cubiertas de coloridas flores, mientras que por las calles se realizan procesiones, bailes o desfiles. También se llevan a cabo peregrinaciones o caminatas hacia la cumbre de alguna montaña que esté coronada por una cruz. Allí, entre cantos y oraciones, los fieles colocan arreglos florales o “visten" (adornan) la cruz.
"Con este signo vencerás"
De acuerdo a un antiquísimo relato, en el siglo IV, el todavía emperador pagano Constantino (hijo de Santa Elena) tenía que librar una batalla contra Majencio, con quien disputaba el poder total sobre el Imperio. La noche anterior al combate, Constantino tuvo un sueño en el que vio una cruz luminosa en los aires y escuchó una voz que le decía: "Con este signo vencerás".
Al día siguiente, antes de empezar la batalla, Constantino mandó colocar cruces en los estandartes de sus batallones, y exclamó: "Confío en Cristo en quien cree mi madre Elena". Ese día, la victoria fue contundente y Constantino ganó el derecho a ser el único emperador. En agradecimiento, Constantino concedió libertad a los cristianos encerrados en las prisiones imperiales.
Después de estos sucesos, Santa Elena, madre de Constantino, viajó a Jerusalén con la intención de encontrar la Santa Cruz en la que Jesucristo murió. En las excavaciones que se realizaron en los alrededores del lugar llamado Gólgota fueron encontradas tres cruces, con lo que surge el dilema sobre cuál de las tres cruces sería la del Señor.
Las tres cruces
De acuerdo a un antiguo relato, un grupo de soldados romanos, con la intención de saber cuál era la Cruz en la que murió Jesús, llevó al lugar del hallazgo a una mujer agonizante. Estos le ordenaron a la mujer que tocara la primera cruz. Sus malestares se agravaron y la enfermedad empeoró en cuestión de minutos. Cuando tocó la segunda cruz, la mujer no mostró cambio ni mejoría alguna, pero al tocar el tercer madero, recuperó la salud de inmediato.
Santa Elena, junto al obispo de Jerusalén y los fieles presentes sacaron aquella cruz en procesión por las calles de la Ciudad Santa. En el camino, el cortejo se cruzó con una viuda que llevaba a enterrar a su hijo. A alguno de los que estaba allí se le ocurrió acercar el cadáver del joven a la cruz y, para desconcierto de todos, el joven volvió a la vida.
Nota litúrgica
Por siglos de siglos, la gran celebración de la cruz ha sido el 3 de mayo, desde Jerusalén hasta Roma, pasando por España e Hispanoamérica.
Sin embargo, tras la reforma de la liturgia romana impulsada por San Juan XXIII a través del motu proprio “Rubricarum instructum” [conjunto de rúbricas], la fiesta de la Cruz de Mayo perdió importancia en relación a la ‘Exaltación de la Santa Cruz’ que se celebra cada 14 de septiembre. En esa fecha se recuerda el aniversario de la consagración de la iglesia del Santo Sepulcro de Jerusalén (año 335), tras el hallazgo de la cruz realizado por Santa Elena.
A pesar del cambio de fecha, la fiesta continúa celebrándose con entusiasmo, inclusive incorporándose al espíritu de la “Pascua Florida”, allí donde la alegría por la Resurrección del Señor se une con la belleza de la primavera o el cambio de estación.
Fuente: ACIPrensa
viernes, 21 de marzo de 2025
DESDE MI CRUZ A TU SOLEDAD!
viernes, 7 de marzo de 2025
Granito de arena de Esperanza....Viernes de Pasión
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Lo primero que verás, tras la muerte, es su rostro. Ya no habrá fe, ni esperanza, ni duda, ni búsqueda..., sólo caridad eterna en la Santísima Trinidad.
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Los apóstoles comprendieron plenamente al Jesús histórico cuando resucitó.
miércoles, 19 de febrero de 2025
POR LA SEÑAL DE LA SANTA CRUZ...
Una invocación esencial de nuestra fe. Todos los católicos la hacemos pero quizá automáticamente y sin meditar su significado. ¿Cuál es la historia de esta frase con la que nos persignamos?
Aunque en la Biblia no está la fórmula exacta, encontramos en el AT algunos salmos con similitud: "Líbrame de mis enemigos, oh Dios mío; protégeme de los que se levantan contra mí." (Sal 59,1) "Líbrame, oh Señor, del hombre malo; guárdame de los hombres violentos." (Sal 140,1)
Aunque no hay un autor específico de esta frase, las prácticas litúrgicas de la Iglesia primitiva, como se describe en "La Tradición Apostólica" de Hipólito de Roma (siglo III), ya muestran la Señal de la Cruz como parte de la oración y bendición.
Tertuliano (160–220 d.C.) en su obra "De Corona Militis" habla sobre la práctica de hacer la señal de la cruz: "En toda acción ordinaria, al entrar o salir, al vestirnos, al lavar, al encender luces, al acostarnos, al sentarnos, trazamos con el dedo la Señal de la Cruz"
San Cirilo de Jerusalén (313-386 d.C.) en sus "Catequesis Mistagógicas" menciona la señal de la cruz en el contexto del bautismo y la oración, y la liturgia.
Esta invocación viene a ser una breve oración que tiene un profundo significado teológico; invoca la Santísima Trinidad y reconoce la redención a través de la crucifixión de Cristo, siendo un acto de fe y protección espiritual.
La frase "de nuestros enemigos líbranos" no se refiere solo a enemigos humanos, sino también a las fuerzas del mal, tentaciones y adversidades que enfrentan los creyentes.
La Iglesia explica en sus documentos Magisteriales que "enemigos" en este contexto incluye tanto las tentaciones personales como las influencias negativas externas, pidiéndole a Dios protección para vivir según Su voluntad.
Jesús también enseña a amar a los enemigos ("amad a vuestros enemigos"), pero esto no contradice la petición de liberación de ellos, ya que se busca la liberación del mal que estos pueden representar.
Su importancia radica en reforzar la unidad de la Iglesia, reconociéndo a Dios como el fundamento de esa unión, y en ser un acto de exorcismo menor, rechazando el mal y afirmando la fe.
Esta fórmula es un legado de la tradición cristiana que sigue siendo relevante hoy, ofreciendo protección, paz y una conexión con la historia y doctrina de la Iglesia. Hagámosla con total meditación y fe, confiando en que verdaderamente por ella, Dios se hace presente.
Por último, para los amantes del latín, se las dejo traducida, esperando Dios los bendiga y los guarde.
In nomine Patris, et Filii, et Spiritus Sancti. Per signum Crucis de inimicis nostris libera nos, Domine Deus noster.
Amen.
martes, 14 de septiembre de 2021
CRUZ
“Recibid todas las penas, grandes y pequeñas, toda inquietud, molestia y enfermedad de toda la vida y de Cada día, creyendo que ellas forman la cruz que os ha preparado el mismo Dios, y ha tenido cuidado de acomodarla a vuestras fuerzas. No la sacudáis de vuestros hombros, no intentéis evadirla, porque será en vano: por muy áspera y pesada que os parezca e insoportable, tomadla generosamente, caminad con ella detrás del Salvador, ponedla en contacto con la suya, unidos a él en espíritu de sacrificio y penitencia, pacientes y resignados como Él. Si hacéis esto, saldrá de la cruz de Cristo una corriente maravillosa, como de fluido eléctrico, de gracia fortificante, que os hará vuestra carga ligera”.
Sermones de la Pasión, Ed. Herder, Friburgo, 1929
EXALTACIÓN DE LA SANTA CRUZ
Hubo un tiempo en el que Dios se hizo hombre, vino a la Tierra y la sembró de Amor, pero no apreciaron ni sus obras ni sus palabras, lo clavaron en la cruz y allí, en ese madero, entregó su vida pensando en aquellos que algún día sufrirían y no encontrarían sentido al dolor.
Bastaría que mis ojos se clavaran contigo en la cruz, para renunciar a todo consuelo humano, a toda rebeldía que nace del corazón cuando no se siente saciado; bastaría dejar que fuera el alma quien tomase la palabra para, al verte crucificado, entender que no puede haber mayor Amor.
Cuando sienta el peso de las penas, hazme el favor, Señor, de volver la mirada a tu cruz y entender que ese amor por el que suspiro ya me lo diste Tú.
Ya hiciste el máximo sacrificio de, siendo Dios, abajarte a la humanidad y permitir, por nuestras miserias, dejarte clavar.
Pero en ese camino doloroso en el que tus carnes soportaron el lado oscuro del ser humano, en esos momentos en los que te humillaste a tal extremo, llevabas siempre en tu pecho la Voluntad de Dios y en tus manos, ofreciéndolo a quienes te herían, tu Corazón.
No es capricho de Dios el sufrimiento, ni compañero que se deba olvidar.
Si quiso Dios ver a su Hijo muerto sin que nadie reparara en su dolor, ¿por qué tú, yo, ¡todos!, vivimos aferrados a los sueños de nuestro corazón?
Dios sólo pide, para Él, un recuerdo; por eso, detrás de cada alma hay una cruz, una cruz que clama desde el silencio que olvidemos lo que fueron nuestros sueños y le acompañemos en el dolor.
Las astillas de ese Madero
dejarán tu corazón herido,
mas ¡cuán poco es el sufrimiento
de vagar con penas, pero vivo,
mientras que Aquél que sólo es Vida
yace solitario, en una cruz muerto!
Madrid, España
Exaltación de la Cruz
JUAN PABLO II Y LA CRUZ: el susurro de Cristo a su oído
Celebrar la exaltación de la cruz y pensar en Juan Pablo II es lo mismo. Él levantó la cruz con fuerza al inicio de su pontificado y pidió que no tuviésemos miedo.
Al final de su vida, como se ve en esta foto tomada una semana antes de morir, apenas podía levantarla, pero sí la vivió en su cuerpo y corazón. Vean bien cómo Cristo le susurra al oído...